17 de octubre de 2008

Frida Kahlo

A veces me pregunto si mi pintura no ha sido, tal como la he realizado, más parecida a la obra de un escritor que a la de un pintor.
Una especie de diario, la correspondencia de toda una vida.
En un comienzo, el lugar donde liberé mi imaginación a la vez que analicé mis hechos y gestos. Luego el espacio donde dí noticias de mí, o de mi persona, simplemente a los seres queridos.
Por otra parte, casi siempre regalé mis pinturas, casi siempre iban destinadas a alguien desde un principio.
Mi obra, la más completa biografia que podria jamás hacerse sobre mi misma.